Lo que pasó ayer

─ Hola Enmanuel, ¿Cómo estás?

─ Hola Juliana, todo bien, ¿Y tú?

─ Todo bien. Supe que estuviste de fiesta anoche. ¿Cómo te fue?

─ ¿Quién te dijo?

─ Mami, hablé con ella anoche.

─ Nuestra madre no puede mantener la boca cerrada.

─ ¡Ay, pero si no es nada!

─ Sí, lo sé. Solo quiero molestar.

─ ¿Y qué hiciste anoche?

─ Sabes, ayer era lunes y hoy tenía escuela, y los demás chicos tenían que trabajar. Fuimos a Acrópolis, cenamos juntos, conocí nuevos amigos, bebimos y hablamos de muchas cosas interesantes.

─ ¿De dónde son tus amigos?

─ Fue un grupo muy internacional. Ada es de Alemania, Iván de Rusia, Carlos es griego, pero ha vivido desde pequeño en Venezuela; Yannis es dominicano, pero de padre griego, Patrick es de Estados Unidos, y Leslie y Pierre de Haití.

─ ¿Yannis y Carlos? Conozco a Yannis y a Carlos.

─ ¿Los conoces? ¿De dónde los conoces?

─ Son amigos de Julián y José.

─ ¡Qué pequeño es el mundo!

─ Sí. A ti te gustan mucho los idiomas y la cultura, supongo que te sentiste muy bien.

─ Así es. ¿Y tú, qué hiciste ayer?

─ Sabes que los lunes no abro el restaurante, así que ayer fue mi día de descanso. Me levanté tarde, fui a hacer ejercicios, luego fui al supermercado a comprar algunas cosas que necesitaba.  Me encontré con mi amiga Rosario y fuimos a almorzar juntas. Almorzamos y hablamos de muchas cosas de mujeres, ya sabes. Pasé por el consultorio de Julián para saludarlo un rato, quería ir a visitarlos a ustedes, pero no tuve tiempo.

─ Sí, te entiendo.

─ El próximo sábado vamos a salir de nuevo, pero aún no sabemos a dónde vamos. Voy a proponer tu restaurante.

─ Oh, sí, sería genial.

─ ¡Claro! Así puedo ver a mi hermanita. Más tarde vamos a bailar, estás invitada.

─ Sabes que no puedo, los fines de semana son los días más ocupados para mí.

─ Puedes dejar a alguien encargado del restaurante.

─ No, eso no me gusta, prefiero estar ahí para tener control total de las cosas.

─ Bueno, luego no digas que no te invité. Te dejo, hablamos más tarde que tengo clases ahora.

─ Está bien, hasta luego.

─ Hasta luego. Besos.