¿A quién te pareces?

Escena I

─ Hola Manuel, José.
─ ¿Qué tal, Carlos, Yannis?
─ Todo bien.
─ ¡Hey, hemos conocido a tu hermano Enmanuel!
─ ¿De verdad?
─ Sí. Lo conocimos en el cumpleaños de un amigo que tenemos en común en acrópolis y el sábado pasado estuvimos en el restaurante de Juliana, nos juntamos otra vez para seguir con la fiesta.
─ ¡Ustedes disfrutan la vida!
─ ¡Hey, Enmanuel se parece a ti, pero Juliana no!
─ Es que Enmanuel y yo nos parecemos a nuestro padre, y Juliana y mi hermano Manuel se parecen a nuestra madre. Pero yo me parezco a mi padre solo físicamente, porque de carácter, me parezco a mi madre; pero Enmanuel, luce como mi padre y se parecen también en el carácter.
─ Mi papá es alto, moreno, cabello crespo corto y gris y ojos marrones. Mi madre es también morena, pero de piel más clara que mi papá, mi papá es más oscuro. Tiene el cabello negro, largo y lacio. También es alta.
─ No me sorprende que ustedes todos sean altos.
─ Así es, pero mi abuela materna era bajita y mi abuelo paterno también. Manuel también es alto, atlético como todos nosotros, con cabello rizado.
─ Enmanuel es muy simpático e inteligente.
─ Sí, es un chico muy agradable y educado. Muy culto.
─ Sí, en casa somos así, aunque claro, no todos mis familiares son educados o simpáticos. Tengo algunos tíos y primos antipáticos, maleducados, y desagradables.
─ No todos podemos ser iguales.
─ Así es, pero tienes suerte de que tus hermanos no tienen ninguna de esas características.
─ ¡Así es! ¡Salud!